Vitaminas para la menopausia: qué priorizar de verdad

Señales de alerta (orientativas): cansancio persistente, mayor susceptibilidad a infecciones, caída de energía, piel/mucosas más secas o bajo estado de ánimo. Estas señales no diagnostican por sí mismas, pero sí justifican revisar ingesta de nutrientes y, si hace falta, pedir analítica (por ejemplo, vitamina D y B12). 

En consulta, priorizo cubrir requerimientos con comida real y usar suplementos solo cuando hay evidencia de déficit o imposibilidad de cubrirlo con la dieta. Si quieres que veamos tu caso en particular reserva tu primera cita gratuita conmigo.

Nutrientes que más se descuidan:

  • Vitamina D (hueso, inmunidad, ánimo).
  • B12 (sistema nervioso, energía), especialmente en vegetarianas o con fármacos que reducen absorción.
  • B6, C, E y K2 (antioxidantes, colágeno, metabolismo de estrógenos, salud ósea/vascular).


Vitaminas para la menopausia: fuentes reales en tu plato

A continuación, tienes una tabla práctica que uso como guía en consulta. Primero, alimentos; después, si no llegas o hay déficit confirmado, suplementos individualizados.

Vitamina

Función destacada en menopausia

Alimentos recomendados

D

Absorción de calcio, densidad ósea, inmunidad, estado de ánimo

Exposición solar responsable (15–20 min aprox. en brazos/cara), pescado azul, yema de huevo, lácteos fortificados, champiñones expuestos al sol.

B12

Energía, memoria, 
sistema nervioso; 
reduce homocisteína

Pescado, carnes magras, huevos, lácteos; alimentos enriquecidos (si vegetariana). Valorar niveles en analítica ante fatiga o uso crónico de antiácidos/IBP.

B6

Síntesis de neurotransmisores (ánimo, sueño), metabolismo de estrógenos

Garbanzos, plátano, avena, pollo/pavo, patata con piel, semillas.

E

Antioxidante; piel/mucosas; puede ayudar en sofocos

AOVE en crudo, frutos secos (almendras), semillas de girasol, aguacate, verduras de hoja verde.

K2

“Dirige” el calcio a hueso y dientes; sinergia con D

Natto, quesos curados, yema de huevo, hígado.

C

Colágeno (piel, articulaciones), absorción de hierro, inmunidad

Cítricos, kiwi, frutos rojos, pimiento crudo, brócoli, coles.


Menú ejemplo (1 día) para cubrir nutrientes

  • Desayuno: yogur natural alto en proteína + kiwi + almendras.
  • Comida: salmón al horno con brócoli y patata; ensalada de hojas verdes con AOVE.
  • Cena: salteado de tofu con pimiento y arroz integral; cítricos de postre.
  • Extra (si procede): exposición solar breve y responsable.
    Este patrón te acerca a D, C, E, B6 y proteínas de calidad. Para B12, refuerza con pescado/huevo o alimentos enriquecidos según tu dieta.

 

Suplementos en menopausia: criterio profesional y seguridad

¿Cuándo valorar suplementos?

  • Vitamina D: si hay déficit o riesgo y la exposición solar/dieta no son suficientes. Controlar con analítica y ajustar dosis.
  • B12: dietas vegetarianas/veganas, malabsorción, fármacos que reducen acidez gástrica o síntomas compatibles + niveles bajos.
  • Otros (E, C, B6, K2): solo con criterio clínico tras revisar dieta, interacciones y objetivos.
    Evita el multivitamínico “por si acaso”: no es más seguro ni más eficaz. Mejor personalizar.

Pautas clave de seguridad

  • Revisa interacciones con medicación y condiciones previas.
  • Ajusta dosis y duración a tus niveles y seguimiento clínico.
  • Prioriza calidad del producto y evidencia; no todo lo “natural” es inocuo.


Nutrientes clave más allá de las vitaminas

La foto completa incluye minerales y macronutrientes que trabajan en equipo con las vitaminas: calcio, magnesio, omega-3 y proteínas para preservar masa muscular y hueso. Integrarlos en tu plato diario multiplica el efecto de las vitaminas para la menopausia y reduce el riesgo de carencias. (Ej.: D + K2 para que el calcio vaya al hueso, no a la arteria).


Errores típicos y cómo evitarlos

  1. Tomar multivitamínicos sin criterio. Corrige la dieta y pide analítica antes de suplementar.
  2. Confiar todo a la pastilla. La base es comida real y hábitos: sueño, movimiento y exposición solar responsable.
  3. Menú pobre en densidad de nutrientes. Falta de verduras, legumbres, pescado, frutos secos → menos vitaminas y peores síntomas. Refuerza la compra y el batch cooking semanal.
  4. Ignorar señales (fatiga, piel/mucosas secas) sin consultar: pueden apuntar a carencias corregibles.


FAQs rápidas

¿Qué vitaminas ayudan a los sofocos?

No hay “bala mágica”, pero E y C pueden apoyar por su efecto antioxidante; aun así, prioriza estilo de vida y hábitos que reducen disparadores (alcohol, tabaco, estrés). Consulta siempre si tomas medicación.

¿Cómo sé si necesito un suplemento?

Por síntomas + analítica + valoración profesional. Suele revisarse D y B12; el resto, caso a caso. Mientras tanto, sube la densidad de nutrientes del plato y vigila tu exposición solar.

Para muchas mujeres, ajustar el plato y los hábitos resuelve la mayor parte de carencias potenciales. Cuando no es suficiente, suplementar con cabeza (basado en analítica y objetivos) es lo que marca la diferencia. Si necesitas guía personalizada, estaré encantada de acompañarte con un plan claro, seguro y realista.

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Mónica Sardón 28 de julio de 2025
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