Suplementos para la menopausia: mucho ruido y pocas certezas
Hoy en día, los suplementos para aliviar los síntomas de la menopausia llenan las redes y las estanterías de farmacias. Prometen regular las hormonas, mejorar el ánimo y acabar con los sofocos. Pero la realidad es que muchos de ellos no cuentan con suficiente evidencia científica que respalde sus efectos.
Sin embargo, hay excepciones. Y una de las más importantes es la cimicifuga racemosa, una planta con años de investigación y resultados sólidos detrás.
Qué es la cimicifuga y cómo actúa
La cimicifuga racemosa, también conocida como "black cohosh" o "cohosh negro", es una planta originaria de Norteamérica cuyos extractos se han usado tradicionalmente para aliviar los síntomas asociados a la menopausia.
A diferencia de otros fitoestrógenos como la soja o el trébol rojo, la cimicifuga no actúa imitando directamente a los estrógenos, sino modulando los receptores del sistema nervioso que participan en la regulación del calor corporal, el sueño y el estado de ánimo.
Esto significa que no es una terapia hormonal, pero puede mejorar la forma en que el cuerpo responde a los cambios hormonales propios de esta etapa.
Lo que dice la evidencia científica
La cimicifuga es, a día de hoy, uno de los suplementos naturales más estudiados para los síntomas de la menopausia, especialmente los sofocos y sudores nocturnos.
- Una revisión de la Cochrane Database (2012) analizó 16 ensayos clínicos con más de 2.000 mujeres y concluyó que los extractos estandarizados de cimicifuga reducen la frecuencia e intensidad de los sofocos en comparación con el placebo, aunque los resultados varían según el tipo de extracto utilizado.
- Estudios más recientes, como los publicados en el Journal of Education and Health Promotion y en Archives of Gynecology and Obstetrics, refuerzan su utilidad también para mejorar el sueño, la irritabilidad y el bienestar general.
- La Agencia Europea del Medicamento (EMA) reconoce oficialmente su uso tradicional para aliviar los síntomas menopáusicos leves y moderados.
En otras palabras: no todos los suplementos funcionan, pero la cimicifuga sí tiene evidencia real que respalda su eficacia y seguridad.
Por qué elegir cimicifuga frente a otros suplementos
Frente a los numerosos productos que se venden como “para la menopausia”, la cimicifuga destaca por varios motivos:
- Evidencia científica sólida: estudios clínicos y revisiones sistemáticas la respaldan.
- Seguridad demostrada: bien tolerada en tratamientos prolongados y con escasos efectos secundarios.
- Alternativa válida para mujeres que no pueden o no desean recibir terapia hormonal sustitutiva.
Cómo tomar cimicifuga en la menopausia
La eficacia depende del tipo de extracto y la dosis. Los estudios más consistentes se han realizado con extractos estandarizados (como isopropanólico o etanólico) en dosis de 20 a 40 mg diarios.
Suele comercializarse en forma de cápsulas o comprimidos y no requiere prescripción médica, aunque se recomienda hacerlo bajo supervisión profesional, especialmente si se combina con otros suplementos o fármacos.
En general:
- Resultados: suelen notarse entre las 4 y 8 semanas.
- Duración del tratamiento: puede mantenerse durante varios meses si es eficaz y bien tolerado.
Efectos secundarios y precauciones
La cimicifuga es segura en la mayoría de los casos. Los efectos secundarios descritos son leves (malestar digestivo o cefalea) y poco frecuentes.
Aun así, conviene evitarla o consultar con un especialista en estos casos:
- Antecedentes de enfermedad hepática.
- Uso de medicación que afecte al hígado.
- Embarazo o lactancia.
También se ha visto que puede potenciar el efecto del tamoxifeno, un fármaco usado en cáncer de mama, por lo que su combinación siempre debe hacerse bajo control médico.
Cimicifuga y menopausia: parte de un abordaje integral
La suplementación en menopausia no debe verse como una solución aislada. La cimicifuga puede ser un gran apoyo, pero el bienestar en esta etapa depende de un enfoque global:
- Ejercicio físico regular, especialmente de fuerza, para mejorar la masa muscular y la densidad ósea.
- Alimentación rica en vegetales, fibra y grasas saludables, que favorece el equilibrio hormonal.
- Gestión del estrés y del sueño, que también influyen en la frecuencia de los sofocos.
La cimicifuga no sustituye estos pilares, pero sí puede ayudar a mejorar la calidad de vida mientras se ajustan otros hábitos.
Encontrar suplementos de calidad en menopausia
Entre los numerosos suplementos que prometen aliviar los síntomas de la menopausia, la cimicifuga racemosa destaca por tener evidencia clínica sólida y un perfil de seguridad favorable.
No es una “píldora milagrosa”, pero sí una herramienta útil dentro de un enfoque global que combine nutrición, ejercicio y cuidado emocional.
Si estás valorando incorporarla, hazlo asesorada por un profesional que conozca tu caso y te ayude a integrarla de forma segura y efectiva en tu plan de bienestar.
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Mónica Sardón
Fundadora y nutricionista de Aiona Nutrición.
Experta en salud hormonal femenina y especializada en menopausia.
Enfoque peso inclusivo y un abordaje "no dieta" para mejorar la salud física y emocional de cada una de las mujeres que viene a consulta. "Gana salud sin perder bienestar" como filosofía de trabajo.