Disruptores hormonales: cómo afectan en la menopausia

¿Te notas más cansada de lo normal? ¿Duermes mal, te sientes hinchada o con cambios de ánimo sin razón aparente?

Puede que no seas tú. Puede que parte del problema venga de tu entorno, de pequeñas cosas del día a día que están interfiriendo con tu equilibrio hormonal sin que lo sepas.

Aunque no los veas, los disruptores hormonales están presentes en muchos productos cotidianos y pueden tener un impacto importante, especialmente en la etapa de la menopausia. En este artículo te explico qué son, dónde están, cómo afectan y, sobre todo, cómo empezar a reducir su impacto de forma sencilla, sin obsesiones.


¿Qué son los disruptores hormonales y por qué es imposible evitarlos por completo?

Los disruptores hormonales o endocrinos son sustancias químicas que interfieren con el funcionamiento normal de tus hormonas. Pueden imitarlas, bloquearlas o alterar su funcionamiento, afectando a procesos como el metabolismo, el sueño, el estado de ánimo, la función tiroidea, la fertilidad o el manejo de los estrógenos.

Están en todas partes: plásticos, cremas, productos de limpieza, pesticidas, textiles, aire... Y aquí viene lo importante: pretender vivir con exposición cero no solo es imposible, sino que puede volverse un motivo de estrés y agobio que también afecta negativamente a tu salud. Lo que buscamos es una reducción consciente, no la perfección, por mucho que nos la vendan en Redes Sociales.


Disruptores hormonales y menopausia: qué relación tienen

Durante la perimenopausia y la menopausia, el cuerpo ya está atravesando muchos cambios: bajan los estrógenos, cambia la distribución de grasa, se alteran los ritmos de sueño y se reduce la energía. Si a eso le sumamos sustancias externas que interfieren en esas hormonas, es fácil que te sientas:

  • Más cansada, incluso aunque duermas lo mismo.
  • Con más dificultad para concentrarte o con "niebla mental".
  • Hinchada, con retención de líquidos o más estreñida.
  • Con cambios en el ritmo intestinal o en la digestón.
  • Con más frío de lo habitual o manos y pies fríos (signos de posible hipotiroidismo).
  • Con más sensibilidad a los cambios de humor o al estrés.

Esto no significa que la causa sea únicamente ambiental, pero los disruptores hormonales pueden amplificar o desencadenar estos síntomas, sobre todo si tu hígado está sobrecargado, tu microbiota alterada o tu exposición ha sido continua durante años.


No puedes evitarlo todo, pero puedes empezar por algo

Buscar una "exposición cero" no es solo irreal: puede volverse una fuente de ansiedad. La contaminación ambiental ya forma parte del paisaje. Pero lo que sí puedes hacer es reducir la exposición evitable, de forma consciente y sin agobios.

Cada pequeño cambio suma. Lo importante es saber y decidir por dónde quieres empezar.

 

Cinco cambios sencillos que puedes hacer hoy para reducir tu exposición a disruptores endocrinos en menopausia

1. Evita calentar comida en tuppers de plástico:

Usa cristal o cerámica cuando puedas, incluso pasa el contenido del tupper al plato antes de calentarlo o calienta la comida en la vitro en vez del microondas siempre que puedas.

2. Intenta no usar sartenes antiadherentes con teflón:

Si puedes, opta por sartenes de hierro fundido, acero inoxidable o cerámicas sin recubrimientos tóxicos.

3. Revisa tus cosméticos habituales.

Si vas a reponer, elige versiones con menos disruptores: sin parabenos, ftalatos, fragancias artificiales. Yo confío en Matarrania, una marca nacional y ecológica muy exigente con reducir los tóxicos en nuestra vida. 

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4. Ventila tu casa cada día y reduce ambientadores o sprays:

Los ambientadores, velas, perfumes... están cargados de bloqueadores hormonales. 

Aire limpio = menos carga química, menos disruptores endocrinos.

5. Compra alimentos que sean:

Ecológicos cuando puedas y lava las frutas y verduras frescas con agua y un chorrito de vinagre de vino o de manzana, o con una cucharada de bicarbonato para reducir residuos de pesticidas.


No se trata de tirar todo lo que tienes

No necesitas cambiarlo todo de golpe ni comprarlo todo nuevo. Pero cuando toque renovar:

  • Elige una sartén sin recubrimientos tóxicos.
  • Compra tuppers de vidrio en vez de plástico.
  • Busca cremas o geles más respetuosos con tu piel y tus hormonas.

Hazlo a tu ritmo, sin exigencia. No desde el miedo, sino desde el cuidado.


Cuidarte también es esto

Conocer los disruptores hormonales y su efecto en la menopausia es una herramienta más para acompañar esta etapa con más conciencia. No necesitas ser perfecta, ni eliminarlo todo. Solo tomar decisiones informadas.

Y si no sabes por dónde empezar, o quieres acompañamiento profesional para ordenar tus hábitos de forma realista, aquí estoy para ayudarte.

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